Mito de Edipo.
Este mito nos remonta la Hermoso y próspero Reino de Tebas, la ciudad más grande de Grecia Antigua, situada al norte de la cordillera de imponente Monte Citerón, Allí reina un Gran hombre Llamado Layo junto a su bella reina Yocasta.
Sin embargo, su historia se tornaría muy trágica cuando rey de Tebas recibió un augurio de un gran oráculo, que le informaba que si en un futuro engendraba a un niño varón, terminaría matándolo a el mismo una vez creciera como adulto.
Consternado por la premonición El rey se quedó hizo todo lo posible para que su mujer NO quedándose embarazada, pero el destino el destino de aquel hombre ya estaba escrito.
Yocasta quedó en cinta al pasar de varios meses dio a luz al bebé más hermoso que ninguno había visto jamás, fuerte y sano, con los rasgos de un ángel, y aunque Yocasta y Layo no eran capaces de matar al recién nacido, decidieron abandonar a su propio hijo en a las orillas del imponente monte Citerón y que las bestias hicieran lo que ellos no pudieron.
Pensaban que el niño moriría, pero nada más lejos que la realidad, el pequeño fue encontrado por otra familia que lo cuidó, crió y le dio el nombre de Edipo.
Edipo creció hasta convertirse en un fuerte hombre y cansado de escuchar rumores sobre verdadero su origen y quienes eran sus padres partió hacia la ciudad de Delfos donde acudió con el Oráculo rogándole información sobre su pasado. El oráculo le confesó a Edipo:
Con tus manos matarás a tu padre y amarás como una mujer a la madre que engendró tu vida en sus entrañas.
Edipo horrorizado por aquellas palabras, salio de hay y decidió abandonar la ciudad para no regresar nunca y jamás encontrarse con sus padres de sangre.
Destrozado cabalgaba por el sendero dejando atrás todo lo conocía y amaba. Se encontró con dos hombres a caballo, quienes de manera déspota le ordenaron se apartase de su camino. Edipo se negó a lo que un hombre respondió apuñalando el cuello del caballo de Edipo, asegurando que así se apartaría. Una nube espesa y gris inundó la cabeza de Edipo y enfurecido asesinó a los dos caballeros e Ignorando los designios del Oráculo cumplió con la primera de las profecías dar muerte con sus manos a quien era su padre Layo, rey de Tebas.

Edipo siguiendo su propio sendero se cruzó con una esfinge. Un gran monstruo parte león, parte ave y con bello rostro de mujer. Esta le prohíbe el paso a menos que aciertes alguno de sus entramados acertijos.
Pero Edipo resolvió sin problemas y venció a la esfinge, el monstruo derrotado se suicidó y a Edipo lo premiaron con la corona del reino de Tebas. Edipo ya como Rey se desposó a la hermosa viuda Yocasta, su madre biológica, y se enamoraron uno del otro sin saber la aberrante verdad.
Del amor nacieron tres hermosos hijos y tras llegar el cuarto y último muchacho una devastadora plaga nublo de la ciudad. El pueblo culpaba a la mano del asesino de Layo por oscuridad que azotaba a la ciudad. Y nadie sabía de qué se trataba de Edipo, claro.
Edipo ignorando la realidad, se prometió terminar con ese asesino, sin saber que realmente fue el quien asesinó a su antiguo rey y padre.
Edipo acudió entonces de nuevo a aquel oráculo de Delfos llamado Tiresias.
Fue él quien por fin le abrió los ojos y le mostró que el era hijo de Layo y Yocasta. Y Que como años atrás le había dicho se convertiría en él asesinó a su padre y había engendrado cuatro hijos con su propia madre.
La raina Yocasta conoció la noticia a los pocos días y la destrozo del tal forma que terminó suicidándose. Edipo con el alma desolada arrancó unos botones del traje de su reina y madre y se sacó los ojos.

Edipo rey resumen:
Bueno ahora ya sabes de los que va el síndrome de edipo. Al igual que con edipo muchas veces somos simples hojas movidas por los soplos del destino, así que piensa dos veces antes de actuar.
Un comentario en «Edipo Rey»